Para podernos deshacer esos "kilitos de más" que la navidad y el año nuevo nos dejaron, nada mejor que desayunar unos delicios huevos pochados.
Este metodo de cocción no utiliza agentes grasos, resalta mucho el sabor natural del huevo y mantiene la yema liquida haciendo que ésta conserve todas sus propiedades.
El huevo de gallina es el más popular y sencillo de usar para esta técnica, su sabor va con todo y la yema adquiere una textura sedosa al paladar. Si utilizas huevos de codorniz, es recomendable acompañarlos con ingredientes suaves y refinados para permitir que el huevo siempre sea la estrella del plato.
Estos son los sencillos pasos que hay que seguir:
Calienta el agua casi hasta llegar a punto de ebullición, agrega vinagre o limón (el agua no debe burbujear)
Mueve ligeramente en circulos hasta formar un pequeño remolino
Rompre los huevos y agregarlos con mucho cuidado mientras el agua sigue en movimiento, cocina por 4 minutos
Envuelve la yema con la clara cocida hasta formar un "paquete"
Retira y escurre el exceso de agua.
Sazona a tu gusto
!Disfruta de este platillo en familia!